Lunes 25 de Noviembre de 2024

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El insólito apodo que recibió Carlos Gardel en su gira por Europa

Carlos Gardel, para nosotros, "el morocho del Abasto".

En ese exótico viaje también iba el médico Enrique Finochietto, que se hizo amigo del Zorzal.

El 15 de noviembre de 1923, Carlos Gardel, José Razzano, sus músicos y acompañantes se embarcaron en el Antonio Delfino rumbo a España para concretar su primera gira europea. En el transatlántico, perteneciente a la línea de navegación alemana Hamburg Süd, viajaban 1.220 pasajeros, de los cuales 147 desembarcarían en el puerto de Vigo, Galicia, el 5 de diciembre.

El buque estaba bautizado así en honor del empresario argentino Antonio María Delfino, que desde 1894 había sido representante sudamericano y socio local de la compañía alemana, a la que había sabido administrar e impulsar hasta convertirla en un verdadero emporio en el Atlántico Sur, compitiendo con la Royal Mail Line británica y la francesa Sud Atlantique.

Don Antonio había muerto el 22 de marzo de 1922, a los 69 años, al día siguiente de que el vapor que llevaba su nombre arribase, en su viaje inaugural, al puerto de Vigo. La Hamburg Süd era una de las empresas que mayor cantidad de inmigrantes gallegos habían traído a Buenos Aires, y hasta el ascenso del nazismo en Alemania sería una potencia.

Carlos Gardel. / Archivo Clarín.

Carlos Gardel. / Archivo Clarín.

Después de la Segunda Guerra, como había ocurrido tras la Primera, la compañía volvería a reconstruirse. En cambio, convertido en transporte de tropas, el Antonio Delfino sería, en 1945, presa de guerra de los británicos, que lo rebautizaron Empire Hallade, y terminaría desguazado y convertido en chatarra en 1956. (1)

Pero esos días estaban lejanos para el casi flamante vapor que llevaba a los artistas argentinos a fines de 1923. Para ellos, los veinte días de travesía resultaban una vacación. En aquellas épocas las diversiones eran sociales: juegos de cartas, actividades deportivas y los célebres bailes.

El poeta Venancio Serrano Clavero, improvisó una oportuna copla: “He visto al joven Gardel / tragando como un lebrel / cuanto llegaba a su mano, / mientras gozaba Razzano / viéndolo gozar a él”.

Felipe Pigna, historiador

Según el relato de Razzano, el viaje fue muy divertido. Se acostaban tarde y solían pedir bifes con papas fritas a las tres de la mañana, dándoles a los camareros propinas abundantes de 1.000 pesos.

También viajaban dos médicos argentinos, profesores de la Universidad de Buenos Aires: el cirujano Enrique Finochietto y el patólogo Eduardo Mariño. Finochietto ya había comenzado a aplicar sus técnicas en el Hospital Rawson, y a su regreso a Buenos Aires, desde 1924 las aplicaría exitosamente en intervenciones torácicas y gastrointestinales.

Sábalo y Bagre, o Gardel y Razzano

El 25 noviembre, el Antonio Delfino atravesó la línea del Ecuador. Los pasajeros homenajearon al dios Neptuno y arrojaron botellas con mensajes al mar. En el festejo del “Cruce de la línea”, Gardel fue bautizado como “Sábalo”, porque se le parecía por su boca grande y porque comía todo lo que encontraba. A Razzano, en cambio, le pusieron “Bagre”, dicen que por sus gestos inexpresivos.

En recordatorio del bautismo, el doctor Finochietto organizaría luego una cena de homenaje a sus nuevos amigos, para la que mandó imprimir un menú, fechado “en el Ecuador, el 29 de noviembre de 1923”, con el título “El soviet de los tragones”.

Carlos Gardel en la película Tango Bar. / Archivo Clarín.

Carlos Gardel en la película Tango Bar. / Archivo Clarín.

Otro pasajero, el poeta y periodista valenciano, radicado en la Argentina desde 1907, Venancio Serrano Clavero, improvisó una oportuna copla: “He visto al joven Gardel / tragando como un lebrel / cuanto llegaba a su mano, / mientras gozaba Razzano / viéndolo gozar a él”. (2)

A principios de diciembre el Antonio Delfino arribó a Vigo, destino de Gardel y sus amigos. Allí los recibió el cónsul argentino, Agustín Remón que, encantado con los artistas, los llevó a la mejor taberna de la ciudad, donde “Sábalo” y “Bagre” pudieron degustar diez platos diferentes a base de pescados y mariscos, como para justificar los apelativos recibidos.

Citas: 1. Antonio González Climent, Antonio M. Delfino. Su vida, su obra, sus barcos (y sus sucesores), en https://www.histarmar.com.ar/InfHistorica-4/Delfino-1.htm. 2. Citado por Ana Turón en https://ana-turon.blogspot.com/2018/04/gardel-en-el-antonio-delfino-1923.html.

E.M.

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