NOTICIAS DE TANGO
Sofía de Ciervo: el tango del siglo XXI se anima a provocar y romper moldes

Sofia del Ciervo (Gentileza)
La cantante, compositora y actriz presenta PUNGA, su disco debut, donde el tango dialoga con la música urbana, lo digital y lo minimalista, dando origen a una nueva expresión sonora que desafía los límites del género.
Sofía de Ciervo irrumpe en la escena musical argentina con una propuesta audaz, incómoda y profundamente contemporánea. A sus 25 años, la cantautora y actriz propone una relectura del tango desde una sensibilidad actual, cruzándolo con los modos de producción de la música urbana y construyendo un universo sonoro que interpela tanto a la tradición como al presente.
Su primer trabajo discográfico, PUNGA (2025), está compuesto por siete canciones que parten del lenguaje del tango, pero están atravesadas por sonidos sintéticos, minimalistas y digitales. El resultado es un disco novedoso, contundente e irreverente, que se anima a inaugurar un nuevo territorio dentro de la música argentina: el tango-perreo.
El proyecto parte de una idea clara: provocar al tango para descubrir qué otra cosa nueva puede decir. No desde la parodia ni desde el collage sonoro, sino manteniendo el cuerpo, el fraseo y la esencia del género, pero con una mirada completamente renovada desde la producción musical.
A diferencia de otros cruces entre tango y electrónica, donde predominan los loops y las atmósferas, Sofía de Ciervo apuesta por la canción como núcleo. La búsqueda fue generar un nuevo sonido, no sumar elementos de manera decorativa. En ese camino, tomó una decisión contundente: prescindir del bandoneón, evitando caer en uno de los lugares más comunes del género.
En PUNGA, el tango aparece cuando emerge el arrabal: en las cadencias, en el pulso de la milonga, en el piano marcando ritmo, en el contrabajo con fraseos bien tangueros. Desde esa base, el disco dialoga con el reggaetón, el trap y el pop electrónico, metabolizando esos lenguajes en un sonido actual, reconocible y situado plenamente en el presente.
La producción artística estuvo a cargo de Tatu Estela, con quien el trabajo fue un proceso intenso de prueba, error y reconstrucción permanente. El disco se realizó tres veces completas hasta llegar al hueso del sonido buscado. Esa insistencia en evitar el lugar común atraviesa todo el material y se traduce en un álbum inquieto, cambiante y deliberadamente provocador.
El minimalismo es una de las claves estéticas del disco. Para Sofía, el tango en su origen es minimalista: guitarra y voz en los burdeles, crudeza y cercanía. Con el tiempo y las grandes orquestas, ese rasgo se fue diluyendo. En la música urbana actual, en cambio, el minimalismo vuelve a ocupar un lugar central, y allí aparece el punto de encuentro entre ambos mundos.
El disco abre con “PUNGA”, un tango urbano con la voz y el piano al frente, y continúa con “MILONGA”, una pieza que fusiona el piano milonguero con un beat de reggaetón, invitando directamente al movimiento del cuerpo. A lo largo del álbum aparecen colaboraciones que amplían aún más el mapa sonoro, como Tomi Lago en “MALABARES”, una canción rockera y trapera cargada de ironía, y Marttein en “VICIO”, el tema que cierra el disco con una impronta oscura y performática.
Desde lo conceptual, PUNGA también construye un universo visual y narrativo propio. Lejos de las imágenes clásicas del tango, la estética del proyecto se apoya en la esgrima criolla, disciplina que antecede a la danza del tango y que aquí funciona como metáfora del enfrentamiento psicológico entre dos arquetipos: la inocencia y la punga, ese costado oscuro, marginal y necesario para la supervivencia en la gran ciudad.
Oriunda de Junín, en el interior de la provincia de Buenos Aires, Sofía de Ciervo no proviene del mundo del tango. Su formación en canto lírico en el Conservatorio Manuel de Falla marcó un primer acercamiento al género, que luego se profundizó a partir de su participación como voz en una orquesta de tango y de su interés por el tango de la calle, ese que habita los márgenes urbanos lejos del museo.
Para la artista, el tango es la representación sonora de lo oscuro, lo molesto y lo sensual que puede llegar a ser el porteño. Una música nacida en los barrios bajos, cargada de dramatismo y sensualidad, que funciona como una fotografía sonora de la noche porteña contemporánea.
La recepción del disco no pasó inadvertida. Hubo rechazo y enojo por parte de sectores más tradicionales, que cuestionaron los límites del género. Sin embargo, también apareció un público ávido de nuevas formas, dispuesto a bailar un tango en un boliche y a disfrutarlo sin recurrir únicamente a la melancolía. Una tensión histórica que ya atravesaron figuras como Astor Piazzolla, Charly García y Luis Alberto Spinetta.
Desde una perspectiva feminista, PUNGA propone una nueva narrativa dentro del tango, alejándose del lamento masculino clásico y abriendo espacio a otras voces y sensibilidades. El disco aborda la ruptura de la inocencia, el encuentro con la sombra y las contradicciones de la vida urbana actual, especialmente desde la experiencia femenina.
En el marco de la presentación de su disco debut, Sofía de Ciervo llevará al escenario esta propuesta sonora y performática que pone al tango en diálogo directo con el presente.
Con PUNGA, Sofía de Ciervo no busca destruir la tradición, sino demostrar que el tango sigue vivo cuando se lo incomoda, cuando se lo saca de la solemnidad y se lo devuelve al cuerpo, al barro y al tiempo que nos toca vivir.
**El tango, en la mirada de Sofía de Ciervo, es la representación.
Redacción | La Folk Argentina
📻 La voz del folklore en todo el país
COMPARTIR:
Comentarios
Aun no hay comentarios, sé el primero en escribir uno!


