En el sector ganadero argentino, hay un debate que se ha mantenido activo a lo largo de 2024: la posibilidad de que se deje de vacunar contra la fiebre aftosa.

Cabe recordar que Argentina tiene dos status sanitarios: una zona libre de aftosa con vacunación, ubicada al norte del Río Colorado; y una zona libre sin vacunación, que está en la Patagonia.

Hay voces que sostienen que seguir manteniendo la vacunación en centro y norte del país no tiene sentido, ya que hace muchos años que no hay casos y que países limítrofes como Brasil ya han dejado de inocular.

Ese debate creció este año luego de que hubiera múltiples quejas por el alto costo que tiene la vacuna antiaftosa, mucho mayor que en otros países de la región, lo que terminó derivando en que el Gobierno permitiera importarlas y estableciera nuevas condiciones para su producción, ampliando la oferta.

En este contexto, el 11° Congreso Ganadero organizado por la Sociedad Rural de Rosario volvió a poner esta cuestión sobre el tapete, cuando un directivo de la Mesa de Enlace se mostró contrario a dejar de vacunar contra esta enfermedad.

AFTOSA: VACUNAR O NO, ESA ES LA CUESTIÓN

“Todo cambio o modificación debe tener un aval técnico serio y riguroso y hoy por hoy, para nuestra entidad es impensable dejar de vacunar”, sostuvo Carlos Castagnani, presidente de Confederaciones Rurales Argentinas (CRA).

En uno de los paneles del congreso, el directivo también destacó el papel de las fundaciones, que desde su perspectiva se erigieron como “un sistema virtuoso y exitoso que logró combatir la fiebre aftosa”.

Y agregó: “Pensar en desactivar este trabajo en conjunto del sector público y privado es volver al pasado y poner en riesgo la sanidad de nuestros rodeos”.

También sostuvo que a partir del sistema de vacunación, la carne argentina pudo ganar mercados a nivel internacional.

IDENTIFICACIÓN ELECTRÓNICA: OTRA POLÉMICA

En tanto, Castagnani también abordó el tema de la Identificación Individual Electrónica Obligatoria y recordó que la postura de CRA es no negarse, pero insistieron en que debe ser voluntaria.

“No podemos obligar al pequeño productor o a aquel productor que no le interese exportar, obligarlo a la identificación, sumando un costo innecesario. No hay argumento a nuestro entender que justifique la obligatoriedad”, afirmó.

El directivo también hizo referencia a un tema sensible para la producción agropecuaria, como es el acceso a líneas de financiamiento y remarcó la necesidad de “lograr créditos blandos, a largo plazo y accesibles”.

En este sentido, puntualizó que “la actividad ganadera necesita un tiempo prudencial, no menos de tres años”, al referirse a la importancia de contar con condiciones financieras que se adapten a los ciclos productivos del sector.

Por último, el titular de CRA defendió la sostenibilidad de la ganadería argentina: “Debemos fortalecer y defender el tema del medio ambiente, somos víctimas de campañas de entidades fundamentalistas que nos hablan de la emisión de carbono de nuestra ganadería. Cuando se realiza el balance de lo emitido y lo que se capta, el balance ganadero es positivo”, remarcó.

Por Infocampo